Boric: El presidente electo más joven de Chile y sus similitudes con otros gobernantes, bajo la mirada de historiadores
Gabriel Boric ganó con 35 años la elección. Con 36 llegará a La Moneda, convirtiéndose en el Presidente de la República más joven de Chile y el más votado. Los historiadores Alejandro San Francisco y Patricio Bernedo explican en qué se parece y en qué difiere su situación de la de Ramón Freire y por qué su sello tiene algún parecido a lo que ocurrió con Arturo Alessandri, Pedro Aguirre Cerda, Salvador Allende y el cambio refundacional de la década de 1920.
Qué observar. En el siglo 19 existieron jefes de gobierno menores o con 36 años. Sin embargo, todos ellos ocuparon el cargo de “prócer”. Luego, Ramón Freire, también con 36 años, ocupó el cargo de director supremo de la nación, el primer puesto en que cohabitaba la figura de jefe de Estado y de Gobierno, según explica Alejandro San Francisco, historiador, académico de la Universidad San Sebastián y de le UC y director de formación del Instituto Res Publica.
“En el siglo XIX hubo otros gobernantes menores. Desde luego José Miguel Carrera (27) en la Patria Vieja -en la Junta de Gobierno-, el propio Freiré (36) tras la caída de Bernardo O’Higgins. Pero es muy notable la juventud es estos tiempos: la Constitución de 1980 establecía que el presidente debía tener 40 años, cuestión que cambió con la reforma del 2005, que bajó a 35 años la edad del gobernante. Ese cambio hoy muestra la primera expresión práctica”, dice.
Patricio Bernedo, Decano de la Facultad de Historia, Geografía y Ciencia Política de la UC, explica que el Chile de Ramón Freire y el de Boric “son países completamente distintos. Cuando tú tenías 20 y tantos años, 30 o 35 a comienzos del siglo 19 no eras considerado tan joven como hoy, ya que en esa época seguir viviendo a los cincuenta años era una proeza, una rareza”.
Un cambio generacional. De acuerdo con Bernedo, más allá de la edad que tendrá al asumir, Boric representa “un cambio generacional muy profundo”.
“Como dijo hace un par de horas el New York Times este es un candidato millenial de izquierda. Tiene una característica refundacional, más allá de los cambios de que se fueron al centro, hay una idea de partir desde cero, hay un optimismo exacerbado y eso es parte de los millenial en el sentido de no mirar la historia, no mirar experiencias anteriores en Chile y otras partes del mundo donde generar esos cambios profundos no es algo fácil de hacer en democracia. Sobre todo, cuando tienes un Parlamento muy equilibrado lo que le va a dificultar esos cambios profundos que plantea”.
El primer presidente de la FECH que llega a La Moneda. De acuerdo con San Francisco, “Gabriel Boric es el primer presidente de la FECH que llega a la Presidencia de la República. Representa el movimiento estudiantil del 2011 (a fines de ese año llegó a encabezar la Federación) y desde ahí y de la FEUC nacen las fuerzas que después dan vida al Frente Amplio”.
¿A qué otros gobiernos, presidentes o momentos en la política chilena se parece?
Alejandro San Francisco: “Tiene algo parecido a la elección de Arturo Alessandri en 1920, de Pedro Aguirre Cerda en 1938 y de Salvador Allende en 1970. Eran reformistas o revolucionarios en su tiempo, muy temidos en su momento. Allende fue muy crítico contra la DC y en algún minuto procuró acercamientos con ella, pero sin éxito”.
El historiador sostiene que la forma de hacer política del Frente Amplio representa “ideologías distintas a la matriz del marxismo de 1970 o de la Concertación en las décadas de 1990 y 2000. Hoy sería algo más plural en los planteamientos doctrinarios, con algo del populismo de Laclau, la idea de radicalización de la democracia y algunas corrientes identitarias presentes en la actualidad, como el feminismo y otras”.
Patricio Bernedo: “Yo compararía este cambio refundacional con la década de 1920. ¿En qué sentido? Allí hay un cambio muy fuerte generacional. Vicente Huidobro se refiere a todo el espectro político que estaba en los años 20 y les dice, “que se vayan los viejos y lleguen los jóvenes”, les enrostra todos los males del país a los viejos y a los políticos de todos los sectores, de izquierda, derecha y de centro y llama a la juventud”.