SEÑOR DIRECTOR:
En junio de este año, el subsecretario de Previsión Social, Christian Larraín, afirmaba que se respetaría la libre elección de las personas que quisieran mantener sus ahorros actuales en las AFP, pero que sobre todos los próximos ingresos no existiría esa posibilidad. Es decir, se respeta la libertad de elegir sobre el dinero ingresado en el sistema actual, pero en el eventual nuevo sistema, no cabría dicha posibilidad.
Esta semana el ministro de Hacienda, Mario Marcel, promete mantener la libertad de elección y la existencia de administradores privados, pero no señala en qué términos y condiciones. Cuestión aún más dudosa si consideramos las promesas de campaña del Presidente Boric, quien prometía el fin de las AFP; o los dichos de Vlado Mirosevic, quien aclaró que con la victoria del Apruebo las AFP verían su fin. A su vez, hace algunos meses se afirmó que el 6% extra de cotización, no sería heredable.
Las palabras del ministro Marcel pueden ser bien intencionadas, pero atentan contra una realidad indiscutible: la izquierda que lideró la Convención y ahora el gobierno no cree que los ahorros de la gente, conseguidos con esfuerzo y trabajo, sean de ellos mismos; al contrario, han repetido hasta el cansancio estar comprometidos con el fin de la propiedad de los ahorros, y el reemplazo del sistema mixto actual por uno que sea de reparto, universal y estatal. La carga de la prueba está en ellos.